Ruinas y cenizas
¿Qué estoy haciendo yo en medio de estas cenizas, desde cuándo los colores se diluyen, por qué me pierdo entre borrones de tinta, y por qué aparece todavía esa muchacha en mis sueños, qué hace entre mis ruinas, por qué llora, si es intocable, mortal o etérea, si se llama Laura y por qué habita desde siempre mi memoria?
Sospecho que tras la aparente calma de mi sueño se esconde en mí un sentimiento terrible, un momento en la penumbra que mis ojos se vuelven inmensos para tratar de ver más allá de lo evidente, se vuelven intensos para tratar de evitar el escape de tu recuerdo, me piden que por favor, que por lo que más quiera, pronuncie su nombre entre delirios, que por favor no te olvide, que pronuncie palabras sensatas, como un 'te extraño', que me abstenga de la vana palabrería y de las que tienen mil significados en vez de uno como Dios manda. Me despierto sin entender nada, sin saber que las ruinas y las cenizas en mis sueños, son las mismas que soñé la noche anterior, y la otra y la otra, remontándose al pasado. Me despierto, me levanto. El día comienza y me siento bien. Son sueños y nada más.