Bebiendo el futuro

Las noches
vagan en el tiempo cuando tú no estás,
bebamos del futuro
y dejémoslas que transcurran en paz.
Sin que decir,
aun en la penumbra tu tenue luz está.
¡Sí! Brillando en mis canales,
saltando de árbol en árbol,
cuidando el corazón junto a la costilla
atando las manos siguiendo los veleros,
los caminos hacia el país de las maravillas.

Pensando cuando terminaré la copa
y veré el fondo, el fin, el vacío,
miradas extrañas y desviadas,
como queriendo mirar el tiempo
–regalo y castigo-.
No se que decir ni escribir
por el tiempo que estoy contigo.
 
Porque al hacer historia fabrico recuerdos
sin duendes que me ayuden a ensamblarlos.
Tiras de papel y listones un suceso triste y amargo
viejos y nuevos, reencuentros, vagas ilusiones.
 
Día a día estás en mi mente
de mi todos son testigos,
decirte en estrofas que te pienso
en copla, rima, verso o prosa.
 
Diciendo tantas cosas escribiendo cartas
que al morirnos nadie recordará.
Por eso y muchas cosas más
 quiero vagar hasta perderme,
quiero beber el futuro,
alzar la copa y brindar: regalo o castigo,
por esos momentos en los que no estoy contigo.